En una localidad muy cercana a Madrid, una multinacional farmacéutica a punto de empezar el último cuatrimestre del año con nuevos objetivos y estrategias, fantásticos materiales promocionales, todo el personal de central entregado preparando la reunión de ciclo para sus 61 comerciales…
Es una reunión más, de las habituales del sector farmacéutico, y está en particular coincide con la vuelta de vacaciones.
¡Más de lo mismo!, piensan muy posiblemente la mayoría de sus delegados. Pero ellos no saben, que el departamento de marketing y ventas, de la mano de formación, se han planteado seguir la premisa de Einstein; “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”.
Como cierre de la reunión, antes de que la red comercial vuelva a sus respectivos territorios, para canalizar y reforzar los aspectos claves de los productos de este ciclo quieren hacerlo de forma diferente, original y con un toque divertido.
Hay que buscar el modo de que los mensajes, la información que llegue sea la correcta y al mismo tiempo por igual, poder corregir y resolver de forma inmediata falsas creencias, a la vez que, potenciar la interactividad de los empleados, y encima hacerles vivir una experiencia agradable. Tarea pelín complicada ¿no?
Con la pelota en nuestro tejado, sabemos que a las personas somos jugones por naturaleza, que jugar es ameno, socializa, mejora las relaciones internas, permite desarrollar conocimiento y habilidades sin darnos cuenta y encima es ¡divertido!
Somos una agencia de eventos donde estamos convencidos que la gamificación es un atractivo valor añadido para cubrir los objetivos que nos ha planteado el cliente, entonces… ¿por qué no aprender jugando?, y proponemos nuestro Juego de athax© como complemento a la formación reglada del cliente.
Ya en la reunión, en el hotel, organizados por equipos, liderados por sus respectivos gerentes… ¡Comienza el juego!
Desde el minuto uno, cuando se lanza el gigantesco dado, se da paso a la emoción, con rapidez y pasión mueven su ficha gigante a la casilla correspondiente, aparece la incertidumbre de no saber a qué prueba se van a enfrentar, ¡zasca!… ¡sorpresa!
Los equipos ponen toda la carne en el asador a la hora de preparar sus pruebas, porque ven que los otros equipos así lo están haciendo y pueden ganar. Luis, el líder del equipo morado grita, ¡ánimo, no podemos quedarnos atrás!
Durante la partida se ponen en juego sus conocimientos y habilidades, se viven momentos de tensión por tratar de ser el primero en el ranking. El juego consigue empujar a los participantes a hacer cosas que quizás de otro modo no harían (nos olvidamos de nuestros prejuicios), como fue el caso del equipo naranja, que aun sabiendo que eran ya ganadores, nos sorprendieron ofreciéndose voluntarios para hacer un role-play y al que tanto miedo se le tiene. ¡Todos están enganchados al juego!
Pero no olvidemos que no se trata de jugar simplemente, todo está orientado a la consecución de unos objetivos de formación.
Fueron algo más de tres horas de juego, un escenario fantástico para que los managers vivan de cerca algunas competencias de sus empleados.
Cuando se juega y nos divertimos, el proceso de aprendizaje es más ágil y la información se queda más fácilmente en nuestra mente.
Estamos convencidos de haber cubierto los objetivos, mediante una experiencia de formación mucho más visual, interactiva y divertida, y que, a buen seguro, ha contribuido para crear marca de compañía con un evento memorable.
- “…, no descarto volver a repetirlo, ¡Gracias!” (director comercial)
Fue un placer jugar con vosotros y os deseamos éxito en vuestros objetivos. ¡Ánimo!
Equipo athax
Cuanta más emoción y pasión, más productividad hay en los equipos.