Los eventos han sido, son y muy posiblemente seguirán siendo un elemento clave en el plan de marketing de las empresas por el gran valor que aportan a los diferentes planes estratégicos de cualquier compañía.
Del mismo modo que una empresa es dinámica, es un sistema abierto en constante interrelación con su entorno, y que este no siempre es igual (nuevas tendencias); a los eventos les pasa lo mismo; también evolucionan.
En esta constante evolución (entorno de la empresa, el marketing, la sociedad, …) nos preguntamos ¿Crece el mercado de eventos y las reuniones corporativas?, ¿Qué objetivos buscan las empresas a la hora de hacer sus eventos?, ¿Qué tendencias demandan los verdaderos protagonistas de los eventos; los asistentes?, y la tecnología… ¿Qué papel juega en los eventos?
Para conocer posibles respuestas a estas preguntas, nos escapamos a la presentación del estudio anual de mercado del sector de eventos y reuniones que realiza Eventoplus en base a sondeos y encuestas realizadas a más de cuatrocientos profesionales y organizadores de eventos.
Las empresas las hacemos las personas, y como humanos que somos, nos gusta planificar lo que vamos a hacer a lo largo del año, aunque sabemos que habrá reajustes en esos planes y en las acciones de marketing, porque la realidad será la que tenga que ser. Dentro de este clásico contexto corporativo, las grandes empresas prevén para este 2018 un crecimiento moderado a la hora de presupuestar eventos; un 3,8%.
Hay indicadores económicos que nos dicen que estamos saliendo de la crisis, otros que no tanto …, solo la realidad que vive cada empresa es la que puede dar respuesta a esto, pero lo que sí es un hecho, es que en las empresas se ha impregnado la cultura empresarial de hacer más por menos.
El hecho de hacer más eventos, con formatos más pequeños, dan más juego y una mayor proximidad con los asistentes, permitiendo una mejor calidad en la comunicación de un mensaje, una idea, una marca…
Hacer grandes eventazos ya no es tan habitual, se dejan para ocasiones determinadas, y crecen los eventos que potencian más la cercanía.
Agencia y cliente, van de la mano para optimizar la gestión del tiempo, con la máxima trasparencia durante todo el proceso, así como la justificación de los costes. Pero, por otro lado, aún queda mucho camino por recorrer por mejorar el sistema de concurso (¿Es necesario convocar a tantas agencias de eventos?) y eliminar las subastas, que no dan valor ninguno a la profesionalidad de las agencias de eventos.
Algunas agencias están homologadas por las empresas, pero la mayoría tenemos que ganarnos la confianza y fidelidad negocio a negocio (B2B), y que en athax disfrutamos, porque creemos que los negocios no son más que transacciones basadas en las relaciones humanas; confianza.
Confianza que nos permite a las agencias conocer muy bien a nuestro cliente, empatizar y entender sus mensajes y valores claves, … necesitamos que las empresas nos involucren en su estrategia.
Y después de todo esto…. ¿Qué nos deparará el 2018?
Como decíamos al principio, los eventos en línea con las empresas, también se transforman, y si bien el impacto de cualquier evento no ha de perderse (como un algo digno de ser recordado), ya no se busca tanto el efecto ¡Wow!, una comunicación a través de una puesta en escena de impresión, sino mediante un formato más pequeño.
Ya no se ve al evento como el momento donde poder comunicar, las empresas también buscan aprender de los auténticos protagonistas; los asistentes. Los eventos, ya sean en un formato muy tecnológico o más tradicional, se han convertido para las compañías en una estupenda oportunidad para conocer mejor a sus targets, donde poder trabajar con ellos, recoger sus ideas, saber qué es lo buscan, … y al mismo tiempo van construyendo ese engagement tan buscado.
El evento ya no se queda en una sala, emerge de ese espacio y se viraliza para llegar a más personas. A lo largo de todo este proceso se va generando contenido, que a su vez será producto de nuevas oportunidades para la marca, la empresa… que realizará nuevos eventos que generen emociones y sensaciones.
¡Aprender no pasa de moda!, la formación y el conocimiento pasan a ser instrumentos claves en la comunicación de las empresas, con nuevos formatos como pueden ser la gamificación y el coworking, y que además permiten fortalecer la relación entre los asistentes clientes, empleados o público en general.
Al hecho de vender de cualquier compañía cada vez va más unido el concepto “cómo puedo mejorar tu vida”. La RSC forma parte de la cultura de las empresas, que ya han dejado la etapa de optimizar y eficiencia energética, para pasar a acciones con un calado más humano (p. ej. se crean eventos para reconstruir pueblos, colegios, …).
Los eventos con varias sedes se mantienen, sin que desaparezca el inconveniente que supone mover a muchas personas, (además del aspecto económico) y aunque contamos con las nuevas tecnologías (de mayor o menor coste) el evento virtual tiene sus inconvenientes; las personas, por lo general, somos cu… de mal asiento, no cuesta estar quietos delante de una pantalla.
Una tendencia que va cogiendo cada vez más auge, es el hecho de que un evento se convierta en la plataforma donde varias marcas tienen su propio espacio de comunicación y experiencias.
Respecto al lujo… siempre nos atrae y seguirá existiendo (¡Somos humanos!), pero desde el inicio de esta última crisis, ya no estimula tanto, no se ve con tan buenos ojos como años atrás. Del mismo modo que las actividades que liberan mucha adrenalina se han dejado para casos muy concretos, ahora las empresas buscan eventos para sus empleados y/o clientes donde la autenticidad sea el factor clave, más saludables (Wellnes) y con agendas no muy apretadas porque los participantes quieren tener momentos de respiro.
La tecnología está cada día más presente ya sea como soporte del propio evento (p. ej. Apps), bien como una propia experiencia (p. ej. gafas interactivas) o como próximos formatos en el diseño de los eventos (hologramas, inteligencia artificial, etc.)
Visto de forma rápida las tendencias en el ámbito nacional que vienen en el mundo de los eventos, es momento de reflexionar … ¿Nuestro modelo de negocio y el hacer de las cosas encaja en este marco?
A este respecto y por nuestra parte, diríamos que… Nos gusta ser disruptivos, con eventos de formato pequeño focalizados en la formación y comunicación mediante dinámicas de gamificación de desarrollo propio. Si bien contamos siempre con apoyo tecnológico, damos mucho protagonismo a aunar la diversidad y estrechar lazos entre compañeros.
Durante nuestras actividades los clientes (empresas) puede ver, oír, vivir las emociones de sus empleados y aprovechar el conocimiento efímero (nuevas ideas, nuevos enfoques, …) que genera el aprendizaje compartido a través del juego. Conocimiento que a su vez será producto de nuevas oportunidades para la marca, la empresa… poner en juego nuevos momentos o eventos corporativos, y a nosotros siempre, para mejorar nuestras actividades de gamificación.
Con nuestros diferentes juegos, se vive dentro de la sala una cercanía y proximidad entre los asistentes, pero la acción sale más allá de las cuatro paredes, bien porque los propios protagonistas viralizan diferentes momentos, bien porque la compañía anuncia/comunica el evento a través de su web, intranet, …
Si bien, no utilizamos el lujo, si cuidamos los detalles y la puesta en escena para que los participantes experimente confort y bienestar para aprender y trabajar jugando. Tal y como dice nuestro claim; “Si lo hacer divertido, hay valor”
A modo de conclusión; nuestro modelo de negocio si encaja y/o va en línea con los nuevos tiempos descritos anteriormente, aunque no somos nosotros los que debemos valorar esto… sois vosotros empresas y clientes (¡Gracias!).
Agradecer desde aquí a Eventoplus por este tipo de iniciativas, así como la oportunidad de poder asistir a la presentación de su estudio de mercado y conocer los nuevos rumbos en la industria de los eventos.
¡Hasta la próxima!
Equipo athax
“Aquellos que dicen que no puede hacerse, no deberían interrumpir a quienes lo están haciendo”